Hay pocos placeres tan democratizados como el de comer una buena hamburguesa acompañada de una cerveza fría; algo que puede parecer una combinación casual, pero que en realidad puede elevarse a una experiencia gastronómica memorable.
El estilo de cerveza escogido será el encargado de aportar el grado extra de personalidad y habitualmente un final sorprendente. Si te atreves con una hamburguesa gourmet de las que triunfan, toma nota de esta receta.