Las enzimas se definen como catalizadores biológicos complejos de naturaleza proteínica, que inducen reacciones sin ser modificados por ellas ni aparecen en el producto final, activándose y desactivándose bajo ciertas condiciones.
Las maltas base son exactamente lo que dicen ser, la base sobre la que se elabora una cerveza, las principales contribuyentes de carbohidratos (a partir del almidón), proteínas y enzimas en la cerveza.
Con todo el ruido que generan estos días las cervezas hiper-lulupadas, es muy fácil olvidar a los humildes granos de malta, a pesar que han sido el fundamento de la cerveza desde hace más de 10.000 años.
La elaboración de cerveza es un proceso milenario que ha evolucionado a lo largo de los años, fusionando ciencia y pasión para crear la bebida fermentada más popular del mundo.
Únicamente se necesitan cuatro ingredientes para elaborar casi cualquier tipo de cerveza, pero cada uno de ellos tiene múltiples opciones relacionadas a la composición del agua, el tostado de las maltas, las variedades de lúpulo y levadura.
Como ya sabemos, la cerveza consta de 4 ingredientes básicos que si o si deben incluirse durante su elaboración: malta (de cebada principalmente), lúpulo, levadura y agua.
Los cereales son la base de la alimentación en prácticamente todas las civilizaciones del mundo: el trigo en Europa, el arroz en Asia y Oceanía y el maíz en América dan de comer a millones de personas.