Aquellos que frecuentan bares de cerveza artesanal habrán observado como el beertender enjuaga las copas y vasos con un chorro de agua fresca justo antes dar paso al servicio en línea desde un barril.
El vaso Pilsner es utilizado para muchos tipos de cervezas claras y cristalinas. Su forma es angosta en la base y se ensancha hacia la parte superior.
La copa Teku es un diseño original desarrollado en 2006 y cuya denominación se origina a partir del acrónimo de los nombres de sus creadores: Teo Musso de la microcervecera italiana Baladin y el analista sensorial Lerenzo Dabove (Kuaska).
La copa Tulipa es muy similar a la copa Snifter, pero de mayor tamaño, con un tallo más alargado y una curvatura que se abre en la parte superior, ideal para cervezas con mucho cuerpo, aromáticas y complejas.
Cada estilo de cerveza tiene una copa o vaso recomendado diseñado para maximizar sus características visuales y organolépticas, su retención de la espuma, transferencia de calor, incluso el ritmo de consumo.
La copa flauta es un recipiente estrecho y alto originalmente desarrollada para el consumo de vinos espumosos con el objetivo principal de evitar la pérdida del CO2 disuelto en el líquido.
Originalmente la copa AFNOR o copa ISO, como también se le conoce, fue desarrollada para la cata global de vinos, con el objetivo de estandarizar un recipiente para fermentados de uva de cualquier variedad y origen.
Aunque la idea de prohibir los vasos de cerveza congelados puede parecer digna de una campaña publicitaria atribuida a un bar hipster, la realidad es que hay muchas buenas razones por las cuales no deberías pedir ni permitir tu cerveza en un vaso congelado.
Popularizada en el siglo XX, la copa Snifter se utiliza principalmente para servir licores envejecidos y aromáticos como el brandy y el whisky, ya que con su gran volumen interior, posee suficiente espacio para agitar cómodamente en remolino.
La copa AnDer fue creada por un equipo liderado por el consultor Derek Walsh, el sommelier André Köppen y el diseñador de copas Alfred De Groot, quienes pretendían cubrir la necesidad de un vaso de cata que todavía no existía en el mundo de la cerveza.
Cada vez que vas a un supermercado o una tienda quedas muy sorprendido la gran cantidad de cristalería disponible para servir vinos, espumosos y cócteles, así como de pobre oferta que encuentras para cerveza.