El Tour de Geuze se puede realizar en bicicleta pero recomiendo hacerlo como yo, en autobús. Que no os tiemblen las piernas porque no se parece a una prueba ciclista, el Tour de Geuze es un recorrido por una decena de empresas cerveceras que abren simultáneamente sus puertas al público sólo cada dos años.
Diez ediciones han tenido lugar desde que en 1997 Boon, De Cam, De Troch, 3 Fonteinen, Lindemans y Timmermans fueran las pioneras en iniciar estas jornadas donde apasionados de la cerveza de todo el mundo viajan a Bélgica.
Su objetivo es degustar las bebidas, comprar botellas y recorrer las instalaciones donde se fabrican las cervezas Lambic que más les gustan y que son difíciles de conseguir en sus países de residencia.
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Cervezas Lambic
¿Qué es una cerveza Lambic? La principal característica de una cerveza Lambic o Lámbica es que su fermentación es completamente espontánea.
Mientras que en el resto de cervezas el mosto (harina molida de malta) es sometido a una fermentación controlada, basada en añadir cepas de levadura específicas y bien conocidas, las cervezas Lambic fermentan -tras hervir el mosto de 2 a 5 horas – durante una noche expuestas al aire, a expensas de las levaduras y bacterias en suspensión.
Pero en el aire de un punto concreto en el mundo, en el valle del Zenne/Senne en Bruselas y en la zona flamenca de Pajottenland, al suroeste de la capital belga, y sólo en un determinado momento del año, entre octubre y abril.
Tras el inicio de esa fermentación espontánea, las cervezas maduran en barriles de roble (que antes sirvieron para coñac, whiskey, oporto…) hasta tres años, como si de un vino se tratara.
En una variedad de las Lambic, las afrutadas, se añaden frutas a las mismas tras el inicio de la fermentación y de ahí surgen tipos como las Kriek – cerezas – o Cassis – zarzaparrilla/grosella negra -, por citar algunos.
Y así, desde hace unos 500 años, sólo en este paisaje agrícola escaso de colinas se consigue elaborar este tipo de cerveza, lo que la hace escasa, peculiar y demandada, aunque no es apta para todos los paladares.
Si estás acostumbrado a los sabores uniformes de la cerveza, dentro del mismo tipo, que puedes degustar por todo el mundo, te chocará el de las Lambic.
Aunque no les chocó, porque lo venían buscando, a los 10.000 asistentes al tour en el año 2015, un número que superó tanto las expectativas de los organizadores que para la siguiente edición aumentaron de uno a dos días la duración del Tour de Geuze.
Las Geuze (o Gueuze si eres francófono y no flamenco) son un tipo de Lambic obtenido a través de la mezcla de Lambics jóvenes (un año) y viejas (de dos a tres años) que continúan fermentando en la botella, de tipo achampañado y de 37,5 cl o 750 ml de capacidad.
El sabor es, pues, una lenta pero constante evolución del sano material bacteriano que continúa su labor entre el cristal después de hacerlo dentro de la madera.
Con reconocimiento de marca de la UE, la etiqueta «Oude Gueuze» se aplica sólo a las Gueuze/Geuze cuyo Lambic base tenga al menos tres años, haya madurado en barriles de roble y carezca de edulcorantes artificiales.
Ese sabor de las Geuze no le resultará extraño a un asturiano, como es mi caso, pues en cierta manera (que me perdonen los excelsos puristas de refinadas papilas gustativas), recuerda a una sidra que no ha sufrido el trasiego.
De hecho, es más que probable que un bebedor habitual de sidra se encuentre más cómodo con una Geuze en la mano mientras que quien esté acostumbrado a los resultados científicos y homogéneos de las cervezas industriales encuentre algo de dificultad a la hora de paladearla.
Como realizar el Tour de Geuze
Lo que no es nada difícil es hacer el Tour de Geuze. Por un lado, la organización oficial bajo el HORAL (Hoge Raad voor Ambachtelijke Lambiekbieren, Alto Consejo de las Cervezas Artesanales Lambic) fleta varios autobuses que se reparten entre varias rutas para dar servicio cada uno a cuatro cervecerías.
El precio del billete, que incluye la salida y regreso a la estación de tren de Halle (el punto de partida, a poco más de un cuarto de hora en tren desde Bruselas) y las explicaciones de un guía a bordo, es de sólo 15 euros.
Si uno desea hacer el Tour de Geuze por su cuenta (ya sea usando los servicios de otras empresas de transporte, tours organizados o medios propios), no hay impedimento: las cervecerías dan la bienvenida a todo el que se acerque y ofrecen al menos una degustación gratuita de uno de sus productos y/o precios reducidos para combinar varias degustaciones.
La moneda local del tour
Para simplificar los pagos, durante el Tour de Geuze cada cervecera tiene una moneda local que puede ser una chapa de botella o una moneda de madera, por ejemplo.
De esta manera uno compra con euros (en algunos casos sólo se acepta efectivo, en otros se admite el pago con tarjeta) una cantidad de estas monedas que son las que se intercambian por la comida o bebida que se consume en las zonas de degustación (cada producto puede requerir un número distinto de monedas).
Si uno quiere adquirir en la tienda de la cervecera botellas o cajas de botellas, estas sí que se pagan en euros.
En algunos casos existe la posibilidad de que, pagando un suplemento, se envíen a domicilio (también al extranjero) para quien no quiera o pueda transportar su compra en ese momento.
En mi caso, realicé el Tour de Geuze en el autobús de la Ruta 3 de HORAL y visité las cerveceras 3 Fonteinen, Lindemans, De Cam, Tilquin.
Brouwerij 3 Fonteinen (Tradicional y Mezcla)
El propio Armand esperaba a las puertas de 3 Fonteinen para regalarle a cada visitante una moneda, canjeable por un vaso de lambic joven.
Armand De Belder es uno de los dos hijos (el otro, Guido, se encarga del Café y Restaurante) de Gaston De Belder, que en 1953 compró el 3 Fonteinen original (que había nacido en 1887) aunque no fue hasta 2013 – tras cuatro años dependiendo de instalaciones y mezclas ajenas – cuando además se iniciaron en una lambic propia.
Geuze, Faro, afrutada, Jonge Lambiek y Oude Lambiek son algunos de los tipos de cerveza que se producen hoy en 3 Fonteinen y que los aficionados a la cerveza compraban por cajas.
Adquirida en fábrica, por ejemplo, la Oude Geuze, Cuvée Armand & Gaston, de 20-10-2016, salía por 66 euros la caja de 6 botellas de 750 ml (y, como he dicho antes, se podía hacer el envío internacional, a países donde el precio final sería muy superior o directamente es imposible de conseguir).
Una curiosidad: una de las variedades de Geuze tiene un sabor que recuerda en cierta manera al sherry y está fermentada en barriles de Jerez español.
3 Fonteinen
Hoogstraat, 2A
B-1650 Beersel
Tel: 02 306 71 03
Fax: 02 305 07 41
[email protected]
www.3fonteinen.be
Marcas de cerveza: 4 (+ 3 experimentales)
Producción: 1000 Hl (2010)
Lindemans (Tradicional, Mezcla y Dulcificada)
Lindemans fue la más grande de las cuatro cerveceras que visité en el Tour de Geuze, la de instalaciones más amplias y modernas, incluyendo abundantes carteles explicativos en tres idiomas, proyección en vídeo, una sala ambientada con humo artificial y empleados vestidos al más puro estilo steam punk.
También es la única que puede decir que lleva ya 7 generaciones de la misma familia al timón de la empresa, que ha ido oscilando – con los vaivenes de los ciclos económicos – entre granja y cervecera según el momento.
Lindemans produce Lambic y Lambic edulcorada y además de hacer sus propias mezclas, suministra mosto a otras cerveceras de la zona.
Una curiosidad: Lindemans también produce ginebra (que no probé) en conjunción con otra conocida cervecera, De Moor, y basadas en alcohol destilado de viejas Kriek Cuvée René.
Lindemans N.V.
Lenniksebaan 1479
1602 Vlezenbeek
Tel: 02 569 03 90
Fax: 02 569 05 10
www.lindemans.be
[email protected]
Marcas de cerveza: 10
Producción: 85.000 Hl (2010)
De Cam (Mezcla)
De Cam es una cervecera tan pequeñita que su maestro cervecero, Karel Goddeau, ni siquiera trabaja allí a tiempo completo.
Cuando no está revisando los mezclas en los toneles de De Cam, lo podéis encontrar empleado en otra cervecería, pero no Lambic para evitar malentendidos.
Además de pequeña, la otra palabra que se puede aplicar a De Cam es tradicional, por técnicas y métodos, aunque – y se lo toman como un orgulloso cumplido – su producción se base en la mezcla de Lambics ajenas.
Personalmente, y sin desmerecer a las demás que visité, es la cervecera en que más encontré lo que esperas cuando «tradicional» y «artesanal» te vienen a la mente pensando en las instalaciones y ves sus filas de barriles de 1.000 litros, con el sello “Pilsner Urquell” perfectamente visible.
Respecto al sabor de las cervezas De Cam que probé, la que más me gustó fue la afrutada con melocotón y nectarina.
Una curiosidad es que el edificio que alberga hoy a la cervecería De Cam fue ya una antigua cervecera a principios del siglo XVIII.
De Oude Cam
Dorpstraat 67A
1755 GOOIK
Tel: 02 532 08 26
Fax: 02 532 08 26
[email protected]
www.oudecam.com (aunque no funciona)
Marcas de cerveza: 4
Producción: 100 Hl (2009)
Tilquin (Mezcla)
Tilquin es tan joven (2009) como su dueño Pierre (38 años) y el apellido de este Bio-Ingeniero le da nombre a la cervecera, la única Lambic que no está en Flandes, pues se encuentra en la mayormente francófona Región de Valonia.
El mosto con que Tilquin trabaja sus mezclas procede de Boon, Lindemans, Girardin y Cantillon y con él ha desarrollado sus cervezas, así que – como De Cam – es propiamente una Gueuzerie (mezcladora).
El mosto fermenta de uno a tres años en barricas de roble y luego unos seis meses más en botella.
De las cervezas que probé en Tilquin, creo que la que mejor sabor de boca me dejó fue la edición limitada Stout Rullquin, tres «monedas» bien invertidas en una cerveza poderosa y con regusto amargo.
Tilquin
Chaussée Maieur Habils 110
1430 Rebecq
Tel: 0472 91 82 91
[email protected]
www.geuezerietilquin.be
Marcas de cerveza: 8
Producción: 500 Hl (2012)
Aunque los menores no pueden beber alcohol, en varias cervecerías disponían de castillos hinchables para niños o zonas para jugar porque a las visitas acudían también familias.
En Bélgica, la afición al mundo de la cerveza no está limitado al varón de la casa y es una tradición cultural sin estereotipos ni de genero ni de otro tipo.
Eso sí, eran los adultos de mi autobús y del resto, los que volvían al vehículo después de cada visita con alguna botella.
Al final del tour, cuando nos dejaron en la estación donde había comenzado el viaje, la escena más repetida era verles acomodarlas en maletas y bolsas, pues se llevaban su preciado tesoro fermentado con sumo cuidado a casa.
El Tour de Geuze es una ocasión única y exclusiva para acceder simultáneamente a cervecerías de un segmento de producción, las Lambic y una peculiaridad geográfica que sólo ocurre una vez cada dos años. Es también una excusa perfecta para visitar Bruselas y Flandes.